| Una profunda rambla discurre paralela a la carretera, hasta la misma localidad. Recibe el nombre de Verdelecho y nos proporcionará la posibilidad de plantear una sugerente actividad de senderismo. Si tiene ánimo, le invitamos a descender por el fondo del lecho reseco, hasta el mismo Desierto de Tabernas en un paseo lleno de atractivos.
No abandone este discurrir de la rambla, si no quiere perderse; podrá así, disfrutar de barrancos, cárcavas, meandros, minas abandonadas y toda suerte de requiebros, hasta salir (y no antes) a la carretera nacional 340; lugar ya conocido en otras rutas, próximo a las instalaciones del Mini Hollywood. Para aquel que no se anime a tal aventura, le invitamos a adentrarse en el pueblo de Olula de Castro.
Su aspecto escalonado, perfectamente blanco, resalta sobre el espartizal del entorno. A la sombra de sus calles y portales, algunos mayores dejan transcurrir el tiempo en partidas de cartas y tertulias, esperando la visita de los que vuelven a casa el fin de semana o en los meses de verano. |
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"Vista aérea"
Aunque no existen monumentos ni atractivos espectaculares, podemos entretenernos en descubrir los rincones de sus calles empinadas, adornadas con macetas y flores, que parece estuvieran engalanadas para nosotros. No dude en entablar una tranquila conversación con alguno de sus habitantes, seguro que ese será el mejor recuerdo de todo el paseo. |
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